Hace unos años se proclamó el 4 de enero como día mundial de la hipnosis, un día en el que, en todo el mundo, se organizan encuentros y eventos relacionados con esta técnica, con el fin de mostrar su realidad y hacerla llegar a la población.
Tradicionalmente, la hipnosis
ha sido una gran desconocida que, además, se ha visto fuertemente
distorsionada por el cine y la televisión, lo que ha creado una imagen
irreal e, incluso, negativa de esta herramienta tan útil y totalmente
natural. Afortunadamente, los tiempos están cambiando y cada día más
gente se acerca a la hipnosis, pierde el miedo a los clichés que la
rodean y disfruta de sus beneficios. En otras palabras, experimentan de
primera mano que: la hipnosis no es como una varita mágica que les hará
perder la voluntad; que hipnotitzable no quiere decir estúpido, más
bien, todo lo contrario, o que no quedan dormidos, son conscientes de
todo lo que les rodea. Asimismo, activan sus recursos internos; logran
cambios positivos que les llevarán a resultados positivos; se dan cuenta
del poder de la palabra y se sienten mejor.
Es posible que alguien todavía tenga en mente la imagen negativa y
fantástica de la hipnosis, le recordaremos que cada día se encuentra en
estado hipnótico varias veces, varias veces cada día ... He aquí algunos
ejemplos bastante gráficos:
- Alguna vez, mientras leía, "se ha metido" en el libro? Ha estado donde se explicaba la historia?
- Alguna vez, mientras conducía, ha llegado a su destino sin recordar cómo? Guiado por su "piloto automático"?
- Alguna vez, mientras miraba la televisión, "ha entrado" en la película?
Estos sólo son pequeños ejemplos cotidianos de estado hipnótico, unos
pequeños ejemplos en los que bajamos nuestra frecuencia cerebral, en los
que nuestro inconsciente nos protege y en el que acepta como reales
historias que no lo son, pero que nos gustan. Si no fuera así, no
estaríamos inmersos en su lectura o visionado.
Como conclusión, podríamos decir que el estado hipnótico es un estado
de "superconcentración", en el que, nuestra mente consciente permanece
pasiva y cede el mando al inconsciente, que centra toda su energía en un
punto concreto. Es como hacer pasar los rayos del Sol por una lupa.
Durante la hipnosis, en ningún momento se pierde el control de uno
mismo, la persona acepta las sugestiones porque son positivas para ella.
La hipnosis puede ser útil en el tratamiento de: la ansiedad, las fobias, algunas depresiones, la autoestima, las adicciones como el tabaquismo y un largo etcétera.
Desconfía de los mitos que la rodean y descubre una herramienta capaz de movilizar tus recursos internos, FELIZ DÍA DE LA HIPNOSIS TODOS !!
Salud!
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