dijous, 12 de gener del 2017

HIPNOSIS A DISTANCIA




Hoy en día, la tecnología, la globalización y el transporte aéreo han encogido el mundo. Podemos estar cerca de nuestros seres queridos aunque estén a miles de quilómetros de distancia, nos comunicamos con ellos a través de internet o volamos hasta su lado en pocas horas. Al mismo tiempo, compramos y enviamos productos a todo el planeta. En ocasiones, la velocidad con la que cambia el mundo es desconcertante, al mismo tiempo que nos brinda oportunidades para nuestro propio bienestar y desarrollo.

Sobre este aspecto, nuestro desarrollo y bienestar, internet juega un papel importante al acercarnos el conocimiento y los recursos compartidos de grandes entendidos y profesionales de infinidad de materias y terapias. Evidentemente, la hipnosis también es una de ellas. A través de la red podemos ver vídeos de profesionales que comparten su conocimiento, podemos acceder a audios con ejercicios para nuestro crecimiento, podemos leer artículos y libros sobre la materia y, también, podemos citarnos con profesionales de todo el mundo.

Actualmente, tenemos la posibilidad de realizar sesiones a distancia gracias a la red, sin importar el lugar de residencia de cada uno de los que conforman el binomio cliente - profesional. Gracias a la tecnología podemos trabajar con quien queremos sin tener que hacer infinidad de quilómetros o, sencillamente, no podernos visitar por la distancia. 

Antes de nada, me gustaría recalcar que esta entrada no es una apología de las sesiones virtuales, es una reflexión sobre las posibilidades que tenemos a nuestro alcance. Personalmente, opino que las sesiones presenciales deben ser lo habitual.

En mi opinión, las sesiones presenciales nos permiten conocer en persona al terapeuta y ver su lugar de trabajo, para sentir si nos transmite total confianza.  La confianza es la base sobre la que versará nuestro proceso, la confianza mutua porque el terapeuta también debe confiar en que el cliente está dispuesto a involucrarse en su proceso. Todo esto es más sencillo en persona, cara a cara. Además, en persona son más controlables las distorsiones externas como teléfonos, timbres, ruido exterior, intensidad de la luz u otros imponderables como una posible abreacción durante la hipnosis.

Por otra parte, la imposibilidad de trabajar en persona con el terapeuta que nos transmite confianza por culpa de la distancia o de la dificultad para desplazarse, nos puede llevar a no recuperar nuestro bienestar por no hacer nada o acudir a otro terapeuta en el que no confiamos sólo porque está cerca.

Ante esta disyuntiva, existe una tercera vía, la sesión de hipnosis a distancia. Una opción que tampoco recomiendo elegir de un modo irreflexivo, por mera comodidad. Debería ser la última opción. Una opción a tener en cuenta, sí, pero si no es posible trabajar cara a cara. Para realizar una sesión a distancia, deberíamos recabar información sobre el profesional si no le conocemos previamente. Si vivimos en el mismo país podemos llamarle por teléfono para exponerle nuestra situación y valorar, entre ambos, la idoneidad de este tipo de trabajo. En el caso de no poder contactar telefónicamente, podemos cruzar emails para, una vez más, conocer la situación y valorar si es adecuado trabajar a distancia.

Si, finalmente, entre ambos, valoramos que es factible trabajar de este modo. Deberíamos seguir las recomendaciones del terapeuta para el momento de la sesión de hipnosis. Por ejemplo, avisar en casa del momento en que se va a realizar la conexión por Skype u otra aplicación similar para que:
  1. No nos interrumpan.
  2. Apagar el teléfono móvil y, si es posible, el fijo.
  3. Tener una suave música de fondo. En mi caso, la mando por email en formato mp3 para que la persona la descargue y la pueda poner.
  4. Buscar una estancia cómoda en la que podamos estar tranquilos.
  5. Revisar la conexión a internet para que no falle a media sesión.
  6. Si es posible, usar cascos. En este caso, no sería necesaria la música de fondo.
De un modo somero, son algunos ítems a tener un cuenta para realizar una sesión a distancia.

Por otro lado, una opción a valorar y más recomendable si es posible por distancia o capacidad de desplazamiento, es hacer la primera sesión en persona y las siguientes a distancia.

Finalmente, recordaros que, como todo en esta vida, mejor en persona, pero la tecnología nos ofrece herramientas para que podamos crecer y aumentar nuestro bienestar trabajando con hipnosis a distancia. Mi experiencia con este tipo de sesiones ha resultado muy grata y me ha permitido disfrutar de la proximidad de alguien que estaba muy lejos, una sensación muy curiosa y gratificante. Al mismo tiempo, me brinda la posibilidad de poder ayudar a más gente y eso me hace muy feliz.

Si tienes alguna duda sobre el tema, escríbeme a info@espaihipnotic.cat o llámame al +34 657323650 y estaré encantado de asesorarte.

Si te ha gustado el artículo, compártelo para que más gente se puede beneficiar de él.

¡Gracias!






ESPAI HIPNÒTIC

Hipnosis - Flores de Bach - Reiki - Regresiones - Masaje

Sant Cugat y Barcelona

Colaborador con el Centro Lesam, Valencia





Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada